Ansiedad y Arteterapia

Comprendiendo la Experiencia Invisible que Anticipa Amenazas en el Futuro

La ansiedad es una experiencia que afecta cada vez a más personas en una sociedad que exige
nuestra atención, energía y cumplimiento constante. Este sentimiento, aunque similar al miedo, surge sin que haya un peligro inmediato. Entonces, ¿qué es exactamente la ansiedad? Y más importante aún, ¿cómo podemos reconocerla y entender su impacto en nuestras vidas?


El psicólogo Moreno (2013) define la ansiedad como "una sensación de tensión, inquietud, aprensión, nerviosismo, preocupación o, en definitiva, una sensación difusa de que algo malo podría ocurrir" (p. 45). A diferencia del miedo, que responde a un peligro inmediato y real, la ansiedad nos coloca en un estado constante de anticipación, imaginando amenazas futuras que pueden o no llegar.
Este estado va acompañado de síntomas físicos como la tensión muscular y el nerviosismo, que, aunque no son tan intensos como el miedo, se vuelven persistentes y desgastantes.

Para muchas personas, la ansiedad deja de ser un estado pasajero y se convierte en una carga diaria. El Manual de Diagnóstico y Estadística de los Trastornos Mentales (DSM-5, 2013) define el trastorno de ansiedad generalizada (TAG) como una preocupación excesiva y constante que dura al menos seis meses, con síntomas como: inquietud, irritabilidad, fatiga precoz y dificultades para concentrarse
o dormir. Esta preocupación es difícil de controlar y puede interferir en áreas importantes de la vida, afectando la estabilidad social, laboral y personal.

Reconocer los síntomas y entender el trastorno es un primer paso hacia el bienestar. Si experimentas una ansiedad constante y te resulta difícil controlar las preocupaciones, podría ser momento de buscar ayuda profesional. Existen caminos terapéuticos, como las artes expresivas y el Enfoque Centrado en la Persona (ECP), que nos brindan recursos valiosos para transformar esta experiencia
desde un lugar de autocompasión y creatividad.

Las artes expresivas centradas en la persona incluyen la pintura, la música, la danza, la escritura y más, nos permiten expresar lo que muchas veces no se puede poner en palabras. Según el enfoque humanista de las artes expresivas, el proceso creativo actúa como una vía de autoconocimiento que facilita la expresión de emociones reprimidas y la descarga emocional. Esto es especialmente útil para quienes viven con ansiedad, ya que, al plasmar sus emociones en un proceso creativo,
pueden visualizar y comprender mejor lo que sienten, liberando las tensiones de manera segura.

Imagina cómo sería sentirte aceptado, sin juicio y con la libertad de expresar tus emociones, mientras te acercas a entender los orígenes de tu ansiedad. Las artes expresivas centradas en la persona no solo ayudan a reducir los síntomas de la ansiedad, sino que también fomentan una reconexión contigo mismo, devolviéndote la confianza para enfrentar los desafíos desde un lugar de
serenidad y fortaleza interna. Partiendo en la premisa de que cada persona tiene un potencial innato para crecer y encontrar sus propias soluciones.

En la consulta se crea un ambiente seguro y de aceptación incondicional, en el que el participante es el protagonista de su propio proceso. Esta confianza y empatía permiten explorar los miedos que alimentan la ansiedad, descubriendo formas de afrontarlos de manera autocompasiva.
Si buscas una forma distinta de abordar la ansiedad, los recursos de las Artes Expresivas pueden
ser una excelente opción en un viaje de autodescubrimiento en el cual la ansiedad no es algo que debes temer, sino una oportunidad para descubrir nuevas formas de bienestar y equilibrio.